SANTA CATALINA
Iglesia de Santa Catalina
La Iglesia de Santa Catalina, cuyos orígenes se fechan en el siglo XV, se muestra al visitante con una sencilla fachada del siglo XVII, compuesta por una puerta adintelada con vano rectangular bajo un óculo y rematada por una torre campanario. El templo dispone de otra segunda entrada, situada en el lado del evangelio que fue construida con sillería adornada por un frontón partido rematado por volutas.
Tiene planta basilical, con tres naves separadas por pilares de granito de sección octogonal sobre los que voltean arcos apuntados de lacrillo. Sobre la nave central una cubierta de madera de estilo mudéjar, con tirantes adornados por estrellas de ocho puntas. El altar mayor, en el que se encuentra el Cristo del Perdón, atribuido a la escuela de Martínez Montañés, está cubierto por una bóveda de aristas. En el lateral del Evangelio, está el camarín de la Virgen de la Salud, decorado con un retablo del siglo XVIII y un sagrario de plata cincelada del siglo XX. Un atractivo conjunto de retablo y ornamentos que guardan la imagen de la Virgen de la Salud.
Aparte de la Virgen de la Salud, existen otras dos importantes imágenes en buen estado de conservación: la Virgen con el niño, fabricada en terracota., y la Piedad, escultura también de barro cocido, con la representación de la Virgen sosteniendo en su regazo; ambas se datan en el siglo XV y su autoría se atribuye a Mercadante de Bretaña.
Por último, el visitante encontrará a ambos lados de la entrada, en el interior, dos pilas de agua bendita realizadas sobre dos capiteles procedentes de Nertóbriga.